@marysese vuelve con la segunda entrega de Abriendo
las alas que será, cuando menos, una trilogía, ya que cuando finalices esta
lectura necesitarás seguir leyendo, esperemos que no se retrase la
continuación.
Lo primero que
tengo que confesar es lo que considero que es una gran virtud que me adorna, mi
capacidad para olvidar, y esta capacidad me ha obligado en varias ocasiones a
releer libros que tienen ‘continuación’, yo solo suelo conservar en mi memoria ‘sensaciones’,
mayormente inciertas, de los libros que leo, eso me incita a leer algunos que ya he leído y que las ideas que conservo en mi memoria no son
suficientes para el inicio de su continuación, y la verdad es que en la mayoría
de las ocasiones ha sido una gozada leer dos o más libros enlazados.
En esta ocasión
he tenido que hacer lo mismo, he tenido que volver a leer el primer capítulo de
esta serie, reseñado en este
blog, pero que a pesar del poco tiempo transcurrido, no conservaba en mi
memoria suficiente información, y aunque lo más probable es que leyendo esta
segunda entrega hubiera sido capaz de recordar lo suficiente, la lectura de los
dos libros consecutivos me ha ayudado mucho a disfrutar más de ellos.
En esta segunda
parte, que nos sigue narrando las aventuras de Puerto y Román, la evolución de
su relación personal se ve afectada por diversas circunstancias y,
fundamentalmente, por un brutal accidente de tráfico que provoca un colapso en
sus relaciones.
A raíz de dicho
accidente, se incorporan algunos de los muy pocos personajes nuevos en la
historia, y alguno de ellos, crucial en las aventuras de esta pareja de
enamorados personajes, pero no voy a profundizar más en la historia, que
únicamente nos muestra un ‘vistazo’ de esa Cara
oculta de la Luna que es el título del libro, porque cuando realmente
veremos por completo esa cara oculta será en la tercera parte, y si tengo
especial interés en leer esa tercera parte, es por corroborar mis intuiciones.
Ya me pasó en la
primera parte, que ‘adiviné’ alguna de las cosas que iban a ocurrir, pero me
equivoqué en otras, y esas cosas son las que te incitan a seguir leyendo, y
espero que no se retrase mucho esa tercera entrega…. ¿Para cuándo Marijose?
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