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jueves, 10 de marzo de 2011

El alcalde del crimen - Francisco Balbuena

Es una novela histórica con varios personajes reales, 'fantásticamente' dibujados, destacando entre todos ellos, Gaspar de Jovellanos, que fue nombrado Alcalde del Crimen (lo que hoy sería un Juez de Instrucción, además de fiscal y Comisario de Policía) en Sevilla en el año 1774. La trama de la novela, es la captura de lo que hoy consideraríamos 'un asesino en serie', ya que aparecen varios muertos, todos relacionados con el clero, con una muerte 'extraña', sin apenas sangre y todos ellos 'sin cabeza', su asesino se la lleva. Impresionante novela, desde el principio hasta el final, con algún otro personaje real, pero la mayoría ficticios, muy bien 'dibujados' por el autor, entre los que destaca Richard Twiss, un inglés que ha pasado por el nuevo mundo, y que será una pieza fundamental en el desarrollo de toda la trama para descubrir al asesino. En una época convulsa con las luchas entre los nobles, la Iglesia, la Inquisición, la masonería.... y la Justicia, representada por El Alcalde del Crímen, los múltiples asesinatos conllevarán enfrentamientos entre los distintos estamentos y provocarán levantamientos populares que solo un pensamiento muy lógico puede desentrañar y solo la conjunción de los pensamientos de Jovellanos y Twiss, ayudados en algún otro caso por Mariana de Guzmán, descendiente de los Guzmanes y con una importante implicación amorosa en la novela, serán capaces de 'seguir' toda la planificación que el asesino ha sido capaz de tramar, para llegar a 'solucionar' el problema.
Increible imaginación del autor, que nos lleva de trama en trama, y con otro personaje, el Doctor Morico, que hacía autopsias de forma 'solapada' ya que todavía estaban prohibidas en la época en España, y que nos ilustra sobre investigaciones y novedades de la época, imprescindibles para descubrir como se asesina o como puede aparecer alguno de los muertos meses después. Quizás le sobre 'algo' de imaginación, pero la novela resulta trepidante y siempre habrá héroes y villanos, y finales felices para unos y no tan felices para otros.
Más que novela histórica, yo lo consideraría como thriller policíaco adaptado al siglo XVIII, con toques amorosos y religiosos de la época.
Simplemente interesante.

4 comentarios:

  1. Yo leí El alcadel del crimen hace un mes. Es cierto que es una novela impresionante, pero también lo es que es más que interesante. La reseña se ha quedado en la superfície. No ha entrado en el corazón de los personajes, ni mucho menos en el espíritu de la época. No es que le sobre imaginación, es que esa imaginación se hace necesaria para dotarla de una dimensión extra, por encima de los meros episodios que narra. De ese modo la historia trasciende, se hace épica, visionaria, y sus personajes adquieren una talla más grande que la vida misma, como se suele decir.
    Amalia.

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  2. Evidentemente se ha malinterpretado mi frase sobre el exceso de imaginación, ese exceso de imaginación está referido a las 'capacidades' malignas del asesino, y precisamente 'ese exceso' es lo que, para mi, convierte a la novela en simplemente interesante, yo no soy muy aficionado a la ciencia ficción. Sin embargo, si que puedo estar de acuerdo con Amalia en que en la reseña, no explicito la profundidad con que están descritos los personajes, sus sentimientos y el espíritu de la época.

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  3. Querido Miguel Ángel.
    Es evidente que las capacidades del asesino parecen sobrehumanas, desproporcionadas, pero lo importante en una narración es que el personaje sea verosímil. En este caso, el Interfector representa el espíritu de su época, el hombre nuevo que estaba ya incubándose, el raptado por la ciencia y por los avances mecánicos, y sobre todo por la ideología. Yo lo interpreto como un superhombre, que además se lo cree a lo largo de la novela, un símbolo a cual vencer entre Jovellanos y Twiss con sus capacidades intelectuales de simples mortales.
    Si nos ponemos a juzgar por tu criterio, prácticamente ninguna novela se salvaría, a menos que fuese de un costumbrismo ramplón y romo. Por ejemplo, en “Los pilares de la tierra”, casi todo lo que se cuenta apenas se corresponde a cómo era la vida en la Edad Media. Ni mucho menos las relaciones entre los hombres eran tal y como se nos cuentan. Las relaciones de dominio, la servidumbre, los estamentos sociales imprimían a la vida un carácter difícilmente imaginable por nosotros habitantes del siglo XXI. Incluso el simple modo de mirar entre la gente, o el de hablarse entre un marido y su mujer, a nosotros nos parecerían propios de extraterrestres. Vete a la India y lo comprobarás. ¿Quiere decir esto que esa novela es vulnerable debido a tal aspecto de “licencia imaginativa” por parte de Follett? En absoluto. Se vale de un mundo “inventado” literariamente para exponer una historia de seres humanos que es consecuente con sus propios postulados. No los traiciona y por eso es una buena novela.

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  4. Gracias por tus opiniones Amalia, estas son las cosas que enriquecen un blog, pero al fin y al cabo son eso 'opiniones', y cuando me hablas de Los Pilares de la Tierra, la novela que considero la más 'grande' que he leído, y con gran diferencia sobre las siguientes, parece que en algo coincidimos, y por cierto, estuve en la India y sé cual es el trato hacia las mujeres, y desgraciadamente no solo allí, donde hace muchos años que estuve, sino que desgraciadamente sigue habiendo muchos sitios donde hoy en día sigue siendo lo mismo.
    Muchas gracias por tus comentarios, porque aunque ya mayorcito, siempre estoy en fase de aprendizaje.

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